Reseña | La última navidad en París, Hazel Gaynor y Heather Webb

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Ciudadela · 6 Octubre 2020 · Histórico · Autoconclusivo

Agosto de 1914. Inglaterra está en guerra. Evie Elliott ve a su hermano Will y a su amigo Thomas Harding partir al frente y piensa, al igual que todo el mundo, que todo acabará antes de Navidad, fecha en que viajarán a París para celebrar las fiestas. Pero la historia nos dice que no fue así. Los tres acabarán viviendo una guerra muy distinta a la que esperaban.

Frustrada por una vida de privilegios, Evie desea desempeñar un papel más importante en el conflicto. Mientras, Thomas se enfrenta a la dura realidad de la guerra y a sus propias batallas personales para sacar adelante el negocio familiar.

En sus cartas, Evie y Thomas compartirán sus esperanzas y sus miedos y crecerá su amistad y afecto mutuo. ¿Podrá florecer el amor en medio de los horrores de la guerra?

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Hay ocasiones que cundo ves la portada de un libro te enamoras automáticamente de ella y tienes que leer ese libro sea como sea, pues bien, yo no conocía la cubierta de la novela que os traigo reseñada, es más no me sonaba para nada ni el título ni la sinopsis, pero fue verla y quedé fascinada totalmente, además la trama está ambientada en la Primera Guerra Mundial, un período histórico que me atrae, eso sin olvidarnos de los personajes, pues los que componen la obra desprenden realismo, emotividad y toda clase de sentimientos. Así, con este conjunto de ingredientes no podíamos tener como resultado algo que dejara indiferente al lector, más bien todo lo contrario, ya que La última navidad en París de Hazel Gaynor y Heather Webb ha conseguido atraparme en una lectura maravillosa, repleta de emociones, con mensajes que calan hondo en el corazón y que nos hace experimentar el dolor, la desesperación y el miedo que sufrieron las personas que se vieron involucradas en una de las peores contiendas del siglo XX. No obstante, también es una historia de amor y esperanza, los dos pilares que ayudarán a Evie y Tom a salir adelante en un mundo que parece cambiar a pasos agigantados y donde sólo cuenta el presente. 

Evie Elliott es una joven de buena familia que vive rodeada de comodidades y disfrutando de una existencia sencilla donde sus preocupaciones no van más allá de asistir a cenas y divertirse con sus amigos. Una vida privilegiada que han hecho de ella una muchacha alegre que desprende luz a todo aquel que la conoce. Pues bien, su mundo comenzará a cambiar cuando en 1914 Inglaterra entre en guerra con Alemania, un conflicto que llevará a su hermano Will a alistarse en el ejército junto a Thomas Harding, su mejor amigo y su compañero de universidad. Un acto de valentía que dejará muy sola a Evie, pues hasta su mejor amiga Alice se encuentra lejos de ella, sin embargo, ninguno de los cuatro piensa que esto vaya a durar mucho, ya que creen que será una contienda sencilla y breve que no alterará sus planes de pasar la próxima navidad en París. 

No obstante, lo que en un principio se pensó que sería una guerra fácil y corta terminará por convertirse en un conflicto demasiado largo y sin sentido donde se perderían millones de vidas. De esta forma, a Evie, Tom, Will y Alice no les quedará otra forma de afrontar los duros momentos que están viviendo que compartiendo sus pensamientos y deseos a través de las cartas que van intercambiando. En ellas nuestra joven expresará todo su pesar por tener que permanecer en casa mientras miles de hombres, entre ellos su hermano, se van al frente para intentar derrotar al enemigo. Ella no quiere un mundo de privilegios, desea ser parte activa en la guerra y buscará la manera de ser útil a su país. Mientras tanto, el continuo intercambio de misivas con Tom le hará profundizar una amistad que ya existía antes de partir, su vía de información más fiable y que le proporciona un rayo de esperanza para un futuro en paz. 

Entretanto Tom encontrará un verdadero apoyo en Evie, él se alistó con unas ideas de lo más románticas de cómo sería la guerra, honor y gloria que le darían la oportunidad de reconciliarse con su padre y hacer que éste estuviera orgulloso de él. Nada más lejos de la realidad, la contienda le demostrará al muchacho lo corta que es la vida, momentos de angustia y sufrimiento a los que hará frente pensando en un futuro junto a los suyos y a la mujer que se ha convertido en alguien imprescindible en su futuro. Sin embargo, los horrores que tendrá que presenciar lo cambiarán poco a poco, ya que las pérdidas lo marcarán y harán que su carácter vaya decayendo, aun así, la joven será su timón en los peores momentos, la luz que ilumine su oscuridad y la única que consiga darle esperanzas con sus palabras. Una relación que irá floreciendo a través de las cartas y de la que ninguno tomará conciencia hasta que la separación se vaya prolongando en el tiempo. Un afecto mutuo que pasará por mil y una batallas, sin embargo, el corazón es sabio y el amor que sienten los hará encontrar la valentía necesaria para sobrevivir a una guerra y cumplir con todas las promesas que se harán a lo largo de cuatro largos años de lucha. 

Hazel Gaynor y Heather Webb me han fascinado con esta novela, es cierto que es la primera vez que leo algo de ellas, no obstante, no podría haber tenido mejor comienzo. Escrito a cuatro manos, la historia es sumamente emotiva y la forma en la que está contada hace que sea mucho más cercana al lector. Así, la obra está estructurada en cinco partes, cada una de ellas se corresponderá con uno de los años en los que se va desarrollando la Gran Guerra. Una novela escrita de forma epistolar que estará compuesta por docenas de cartas, las mismas que se intercambiarán durante el conflicto Evie y Tom, además de otras de amigos de la pareja o familiares de los mismos. De este modo, con una forma de narrar cercana e íntima en la mayoría de las ocasiones, las autoras han querido que conozcamos la evolución de la guerra a través de ellos y como cambiará el ánimo de los personajes, plasmando sus pensamientos, sus ilusiones y sus miedos en unas misivas que serán recibidas por sus seres queridos, algo que ha hecho de la novela una obra muy especial. Una forma de estructurar el libro que ha dado como resultado una lectura adictiva que invitaba a seguir adelante, porque las emociones estarán a flor de piel en todo momento y eso lo empatizará el lector. Los personajes están magníficos a lo largo de la trama, la única interacción entre ellos es a través de sus mensajes, pero con éstos no tienen problema en mantener la chispa, un interés que va en aumento a medida que vamos avanzando. Todos ellos son personas fuertes y valientes que les tocará vivir el peor momento de sus vidas. Sus personalidades se irán perfilando, pasarán de ser jóvenes optimistas, sin preocupaciones y que piensan que el sufrimiento es algo ajeno a ellos, a vivir horrores, pérdidas y batallas personales que los curtirán haciéndolos avanzar por la senda de la vida y enseñándoles lo importante que es el presente sin importar que pueda traer el futuro. Una novela de emociones donde fluirá el amor, la esperanza, la desolación, el miedo, el agotamiento y una amistad que evolucionará con los años. Evie y Tom han conseguido crear una relación preciosa y llena de matices que madurará en un amor intenso que podrá hacer frente a todo, una sucesión de momento vividos que los marcarán profundamente, pero también los acercará haciendo más palpable su afecto, algo que les costará admitir al principio, asimismo cuando lo hagan será más fuerte que el tiempo y la separación. En cuanto a los secundarios, tendrán su pedacito propio en la historia, Will, Alice y el resto no serán meros acompañantes, compartirán vivencias con nuestra pareja, se convertirán en recuerdos siempre presentes y significarán una constante que les dará fuerzas para continuar. Para terminar, sólo me queda mencionar la ambientación, esta ha sido totalmente perfecta, la Primera Guerra Mundial fue un período del siglo XX duro y difícil, años que cambiaron la historia para siempre y que significaron el descubrimiento de la guerra moderna, un conflicto cruel que las autoras han sabido reflejar muy bien a través de las emociones que nos han transmitido y de una historia de amor que me costará olvidar. 

La última navidad en París de Hazel Gaynor y Heather Webb es una novela preciosa con la Primera Guerra Mundial como telón de fondo, una historia donde los sentimientos fluirán a través de las palabras, pues un grupo de personas valientes nos mostrarán por medio de sus cartas como está cambiando el mundo, sus esperanzas, sus miedos y sus ilusiones, emociones que serán el eje central de una trama emotiva e inspiradora que nos enseñará como es el amor de verdad.