Reseña | Caramel Macchiato, Pat Casalà

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Phoebe · 22 Marzo 2021 · Contemporáneo · Autoconclusivo

Me llamo Holly Gibbons y soy la hija del dueño de la compañía aérea GBS Airlines. Debería estar aprovechando mis años en Yale para prepararme para el futuro, pero ¿en serio alguien piensa que voy a preocuparme por estudiar cuando voy a heredar una fortuna? El problema es que el pesado de mi padre se enfadó cuando descubrió que en vez de ir a clase estaba todo el día de fiesta, y me ha mandado a Little Falls, Arkansas, el pueblo donde nació, a casa de mi tía Molly, obligándome a trabajar en su rancho. ¡Pero no me conoce si cree que puede retenerme allí! Aunque lo de quitarme las tarjetas de crédito y dejarme sin dinero es un golpe bajo…

Me llamo Clark Barrett y vivo en una caravana en Little Falls. Me hubiera encantado ir a la universidad y estudiar Ingeniería aeronáutica, pero es un sueño imposible, porque desde que mi madre nos abandonó soy el cabeza de familia. Trabajo desde los catorce años en el rancho de Molly y Adam para pagar las facturas y las deudas. La vida me obligó a valerme por mí mismo muy pronto, y no me quejo. Soy muy curioso, y me apasionan los manuales de mecánica. Hace dos años, Adam me regaló un libro electrónico con un centenar de manuales diferentes. Es mi bien más preciado. Leo a todas horas, incluso cuando estoy caminando. Aunque, después de chocar con esa estirada de Holly Gibbons, no sé si volveré a hacerlo sin fijarme por dónde piso.

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Son varias las novelas de Pat Casalà que he leído en los últimos años y siempre las finalizó con una sensación de plenitud aumentando mis deseos de seguir leyéndola, lo que me incita a seguirle la pista para estar al tanto de sus nuevas publicaciones. Pues bien, Ediciones Pàmies, concretamente el sello Phoebe, ha abierto las puertas de su bella familia a esta gran pluma y estilo con la novela Caramel Macchiato, una historia fresca, intensa y cargada de giros que ha sabido sumergirme en una trama de superación, madurez y grandes sacrificios dejándome eclipsada por todo lo que he ido desvelando y que me ha conducido a una obra con un desenlace repleto de posibilidades.

Holly Gibbons disfruta viviendo la vida al máximo, sin penas ni responsabilidades. Ir de fiesta en fiesta, emborracharse y desfasar es su forma de pasarlo bien, además ser hija del dueño de la compañía aérea GBS Airlines le ha dado el dinero y la posición para no preocuparse del mañana, por eso sus años universitarios en Yale no son momentos para el estudio y la preparación profesional, más bien son para divertirse y estar de juerga continua. No obstante, su padre, el frío Luther Gibbons, tras años ignorándola va a cortar este descontrol y locura enviándola a Little Falls, encerrándola durante meses en el rancho de su tía Molly, un lugar apartado de todo y alejado de aquellos a los que conoce, convirtiendo su retiro en una prisión sin plan de escape. Esta traición será un duro golpe para ella, nunca imaginó que tras toda su vida siendo excluida de todo ahora sería castigada de manera tan cruel, ya que vivir con gente tan simple y trabajar de sol a sol rodeada de tierra y animales es algo desmedido si lo que quería su progenitor era meterla en vereda, pero no piensa flaquear ni ceder a las órdenes de estos pueblerinos.

Clark Barrett es todo lo opuesto a nuestra heroína, cabal, responsable y trabajador, hace años que cuida de su familia dando de lado sus aspiraciones y metas, lo que lo ha llevado a madurar demasiado pronto. Pese a todo, resiste los golpes que el destino se empeña en asestarle, pues trabajar en el rancho de Molly y Adam es un respiro para la presión diaria que soporta ayudándole a pagar las deudas adquiridas y que en cierto momento casi destruyeron su mundo. Por otro lado, cuenta con dos grandes aficiones que llenan sus días y aligeran sus penas, sumergirse en su taller y leer los manuales de mecánica, dos pasiones que le permiten estar más cerca de sus sueños y que le dan alas para seguir adelante. Con lo cual, todo es como él desea, controlado y planeado al milímetro o por lo menos lo era hasta que la sobrina de sus jefes hace acto de presencia, una chica rica e irresponsable, distinta a todas las que conoce que chocará en más de un sentido con él alterando todos sus planes.

Así pues, cuando Holly, amante de las comodidades, de la buena ropa y del café del Starbucks, choca literalmente con Clark, un apasionado de la mecánica y un trabajador entregado, sus mundos explosionan dejándolos expuestos a sus miedos y debilidades, de esta forma, las opuestas personalidades los guiarán a continuos enfrentamientos, donde la chispa y el deseo será una constante. Asimismo, la soledad que siempre ha sentido Holly la hará conectar de una manera asombrosa con el insufrible chico que tantas emociones le despierta. Clark, por su parte, se negará cualquier sentimiento hacia la consentida que acaba de llegar al rancho, tan diferente a lo que está acostumbrado, pero que sin darse cuenta esta sanando las heridas que la marca de su novia Kim le habían dejado. Pese a todo lo que los separa y hay en contra, sus sentimientos ganarán la batalla y los llevará a un comienzo de relación un tanto insegura, pero cargada de dicha, sin embargo, el dinero o la falta de él, el pasado vivido por Clark, el apego a los suyos y el padre de Holly serán grandes obstáculos que afrontar y que los llenarán de miedos y desconfianza, además una gran mentira ha rodeado la vida de los Gibbons por años, algo impensable que estallará y golpeará de lleno su relación midiendo su fortaleza y la grandeza de su amor, un desafío que cambiará muchas vidas, pero principalmente las suyas.

Pat Casalà nos despierta el gusto y el olfato con este jugoso romance donde el café y sus variadas combinaciones tendrán un significado especial para sus protagonistas despertando así la mente del lector para abrirnos el alma a una historia distinta donde dos mundos alejados y muy diferentes colisionarán para unirse y dar esperanzas de un futuro mejor sin tanta soledad ni consternación. De esta manera, nos encontramos con dos jóvenes que han perdido, con distinta forma de afrontar la vida, pero con una misma herida en el corazón, por lo tanto, conocerse fue un regalo del destino que los va a empujar a cambiar, a madurar y también a pensar en lo que querían, algo que Clark nunca había hecho pero que tras conocer a Holly decidirá replantearse muchas cosas. Sin embargo, no será una simple historia de amor donde el dinero será un bache que dejar atrás, ese será uno de tantos, pues habrá muchos más, desvelándonos que las familias de este par de enamorados no son perfectas y que ni siquiera el poder podrá ocultarlo. Con lo cual, durante la lectura veremos que bloquea la vida de Clark y sus tres hermanos, también desvelaremos las razones que empujó al gran Luther Gibbons a recluir a su hija en Little Falls, algo más profundo que sus juergas que vendrá acompañado de insólitas sorpresas y mayores incógnitas que revelar. Igualmente, el libro ha contado con grandes secundarios, podría empezar con la hasta ahora novia de Clark, Kim, la cual será un importante punto de inflexión que determinará muchas decisiones, también estarán los hermanos de nuestro héroe, principalmente Dinah, una joven decidida y luchadora que me encantó y que me dejó con muchas preguntas por resolver, otro punto clave será Troy, el hermano de Holly, y el que desatará el caos que encontraremos en el final de la obra y para terminar los tíos de nuestra protagonista, una pareja fantástica que esconden alguna que otra cosa. Todo esto solo me hizo desear seguir conociendo a estas dos familias y sus secretos por lo que ojalá Pat nos traiga más tramas donde los Gibbons y los Barrett sean protagonistas y nos den la solución a todas las dudas que han quedado en el aire. Como veis, una novela con mucho que ofrecer, hallas amor, sufrimiento, pesar y dolor, todo ello para que se produzca una evolución personal clara en cada uno de ellos, aunque la que más avanza es Holly, su madurez es de admirar, una chica que te cae mal nada más conocerla sabrá aprender y cambiar, dándonos una versión mucho más cercana y humilde de sí misma, una joven que sabrá amar y dejarse amar, algo que en un principio no veía posible y que tras meses junto a Clark será lo que la represente. No obstante, como he dicho habrá momentos dolorosos y tensos que impregnarán la historia de una intensa aura emocional, palpable, con la que empatizaremos gracias a la maestría transmitiendo de Pat, instantes duros que pondrán el broche de oro a la novela dejándonos atrapados en Little Falls y con ganas de saber mucho más de los personajes que nos han acompañado durante toda su lectura. Sin más, finalizar destacando la prosa fresca, profunda y sencilla de la autora, una gran obra que debéis leer si queréis deleitaros con una trama que lo tiene todo para enamorarte.

Caramel Macchiato de Pat Casalà es una verdadera delicia para los sentidos, una exquisita historia de amor con todo lo necesario para enamorar y conquistar, una novela donde dos corazones sin nada en común conectarán y unirán para no separarse jamás, pase lo que pase y pese a quien pese, un amor indestructible que será la solución a todo lo soñado.