Reseña | Hasta que llegaste, Kristan Higgins

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Libros de Seda · 13 Septiembre 2013 · Contemporáneo · Autoconclusivo

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Hasta que llegaste de Kristan Higgins es una historia que te deja extasiada y con el deseo de seguir probando la pluma de su autora, pues sabe cómo lograr que el lector se entregue sin reservas a la trama que narra. No obstante, no es tanto lo que cuenta sino como lo cuenta, de un modo sencillo y pausado, por lo que una vez inicias su lectura te es imposible parar, de este modo, el romance que relata lo terminas haciendo tuyo y la pareja protagonista junto a sus secundarios acaban siendo parte de ti, ganándose de una forma u otra un hueco en tu corazón. Un libro plagado de emociones, donde el pasado jugará un papel muy importante para el futuro que les espera.

Cordelia Osterhagen o como todos la conocen Posey es hija adoptiva de un matrimonio alemán y aunque nunca ha conocido a sus padres biológicos es feliz junto a la familia que le abrió las puertas de su hogar. Es una joven guapa, inteligente y de complexión menuda, algo que le ha acarreado a lo largo de los años risas y bromas de mal gusto. En la actualidad es dichosa con la vida que lleva, pues su negocio Piezas únicas dedicado a la deconstrucción de edificios y a la restauración de objetos le va bien, posee una magnífica casa o más bien una iglesia que está arreglando en la que vive junto a sus gatos y su amado perro Shilo. La única pega que tiene su vida es la ausencia de alguien que la ame, pues ya entregó su corazón y no le fue nada bien. Este joven fue su primer amor por el que suspiraba y al que idolatraba, sin embargo, unas erradas palabras terminaron rompiendo su inocencia y marcándola más de lo que ya estaba. Ahora, tiempo después, ese muchacho ha regresado convertido en un hombre mucho más tentador y Posey deberá demostrar que puede estar cerca de él sin volver a caer rendida y sin entregar nuevamente su maltrecho corazón.

Liam Murphy viudo y padre de una niña de quince años, Nicole, regresa al hogar de su difunta esposa, Bellsford. Este lugar fue para él uno de los más importantes entre todos los que vivió, pues conoció a su amada Emma y consiguió tocar la felicidad. Ahora ha vuelto y debe hacer frente a todo lo que dejó atrás, su fama de ligón, mujeres despechadas y hombres celosos, sin embargo, no piensa huir pues va a darle a su hija el hogar que él nunca tuvo y que ella tanto se merece. Así pues, junto a su adorable niña y su negocio de coches espera dar paz y tranquilidad a su vida, además de conseguir superar miedos y obsesiones que de un tiempo a esta parte lo persiguen, sin embargo, su retorno no va a ser como esperaba pues una pequeña y atractiva mujer va a lograr ilusionarlo nuevamente, divirtiéndolo y enamorándolo, lo que la convertirá en un peligro para su corazón.

De esta forma, Posey no está preparada para volver a ver a Liam, los últimos recuerdos que tiene de él son dolorosos y estos abren antiguas heridas que creía superadas, complejos olvidados vuelven a salir a la luz, pero nuestra heroína es fuerte y no piensa flaquear. Liam por su parte no desea volver a sufrir por amor, así que iniciará una intensa relación con Cordelia basada en el deseo y el placer, nada de promesas o ataduras. Así pues, ambos comenzarán una relación divertida, pero también tierna, donde no está permitido enamorarse, no obstante, aunque ambos lo intentan los sentimientos acaban apareciendo desembocando de forma distinta en cada uno, algo que los enfrentará y terminará distanciándolos, pues antes de aceptar la felicidad que el destino les ofrece deberán afrontar sus temores y solucionar fantasmas del pasado.

Kristan Higgins me ha cautivado con su novela, una historia con lo que me he reído, pero también llorado y sufrido. La fragilidad que demuestra Posey y la fortaleza con la que se enfrenta a todo ha conseguido sorprenderme y maravillarme logrando que se convierta en una heroína difícil de olvidar. Con lo cual, a lo largo de esta hermosa historia viviremos de cerca los traumas no superados de Posey, algo que sigue marcándola en el presente y que además se van a ver agravados por la actitud inicial de su amado. Asimismo, Liam sabe cómo enamorarnos, pues, aunque aparenta ser el duro del lugar realmente es más humano y cercano de lo que cree, ganándose el afecto del lector gracias a la relación que tiene con su hija y a los detalles que tendrá con Posey, algo que nos va a demostrar el gran amor que le tiene, aunque él lo niegue constantemente. Pero no solo son magistrales la pareja protagonista, los secundarios le dan a la trama el toque especial para que la historia de amor de Cordelia y Liam, a pesar de las dificultades y problemas que van a vivir, sea el romance por excelencia, creado para cautivar. Sin más, sólo deciros que Posey no va a estar sola, pues a su lado estarán sus cariñosos, aunque extravagantes padres, pero también va a contar con el apoyo de su hermano y amigos que van a arroparla y protegerla, además de hacernos reír con sus locuras. Sin embargo, sólo deciros que creo que el mayor apoyo de Posey, el cual nunca la abandona, es Shilo, su enorme perro que terminará robándote el corazón con la ternura y cariño que desprende. Finalmente comentar que la prosa de su autora no solo engancha además conquista, siendo rápida, ligera y sublime, completamente adictiva, consiguiendo despertar tu interés para continuar sumergiéndote en la pluma de su autora.

Hasta que llegaste de Kristan Higgins es una novela donde el pasado y el presente se van a unir para acercar a dos personas que sin ellos imaginarlo estaban destinadas a vivir una preciosa historia de amor, aunque era preciso el paso del tiempo y que madurarán para que su hermoso romance terminará floreciendo.