Me encanta Christine Cross, creo que desde muy pronto formó parte de esa lista de autoras a las que siempre vuelvo cuando quiero reencontrarme con auténticos romances donde los personajes y la historia tienen ese algo que no te deja indiferente. Pues bien, hoy vengo a traeros el último libro que he leído de ella, Las estaciones del corazón, una novela que nos hará enamorarnos de los maravillosos parajes de la Venecia del siglo XVIII, disfrutar de las melodías que la música clásica de Vivaldi nos ofrece y sumergirnos en una pasión intensa donde el amor sabrá endulzar los corazones de dos amantes que tendrán que descubrir un fascinante misterio para desvelar a ese enemigo que amenaza sus vidas. Así, Aria hará todo lo posible por encontrar a los culpables de que todo su mundo haya saltado en pedazos, una huida desesperada para reconstruir los retazos de un pasado olvidado y sacar a la luz un secreto, todo ello mientras lucha contra una atracción abrasadora que surgirá de las notas de unas emociones que ella y Lorenzo sabrán interpretar.
Aria Corsetti tenía una vida feliz junto a su padre en Florencia, un apasionado de la música que sentía debilidad por el maestro Vivaldi, sin embargo, la muerte repentina de Iacopo y la posibilidad de que el fallecimiento haya sido un asesinato, sumirá a la joven en la mayor de las tristezas, siendo además ella misma la siguiente víctima de un asesino que ansía algo que está en su poder. Un suceso atroz que cree está relacionado con la última partitura que adquirió su progenitor, una donde Vivaldi parece haber escondido un secreto por el que parece que alguien está dispuesto a matar. De ese modo, la que creía que sería una existencia tranquila se convertirá en una huida para salvar su vida y el amargo dolor de dejar tras de sí a las personas que quiere, algo que incluye al conde Lorenzo Fabrini, el hombre que se ha colado en su corazón sin ella darse cuenta.
El conde Lorenzo Fabrini es un hombre frío y reservado, su posición como consejero del gran duque Leopoldo II lo han puesto en una posición de poder que no siempre desea, no obstante, debajo de esa fachada hay un alma apasionada que disfruta expresándose con la música, pues el violín es su pasión y también el instrumento para canalizar sus emociones más profundas. Por esto mismo, cuando su mirada se cruce con la de Aria sentirá que ha hallado su melodía perfecta, la mujer con la que podría abrir su corazón sin el miedo a que le hagan daño, sin embargo, un trágico suceso y la posterior huida de la joven le harán replantearse sus sentimientos, pues estos son fuertes, pero la falta de confianza por parte de ella hace imposible que pueda protegerla del peligro que la acecha.
Un cruce de miradas será el comienzo de algo mucho más intenso, un momento donde sentirán que todo desaparece y ellos son los únicos personajes en una representación donde la atracción dará paso a una pasión abrasadora que se empeñan en refrenar, pues Aria y Lorenzo sentirán que las emociones que han comenzado a florecer no van a desaparecer, sin embargo, la muerte del padre de la dama hará que ella tema por su vida y tome una decisión que la alejará de la que podría ser su felicidad. Una desaparición que el conde no tolerará y, sobre la cual tomará cartas muy pronto, pues sabe que su responsabilidad primordial es proteger a esa mujer que lo ha hecho sentir después de tanto tiempo. Así, no dudará en darle todo su apoyo a pesar de la desconfianza de ella, involucrándose en una búsqueda frenética por descubrir un secreto que podría sacar a la a luz la identidad de un asesino y desvelar un misterio largo tiempo oculto, todo ello mientras ese amor que ha nacido entre ellos se hace cada vez más grande.
Christine Cross ha vuelto a mí con una historia preciosa donde los sentimientos y las dulces melodías de Vivaldi se entremezclan para dar forma a un romance delicioso en el que dos personas sentirán la necesidad de amarse, expresar las emociones que los embargan y que son el principio de algo inolvidable. Con una prosa elegante y delicada, cuida cada detalle de la trama y nos sumerge en la Florencia del siglo XVIII, sus parajes, sus monumentos y ese patrimonio artístico que tanto la representa, de igual modo también nos lleva a la fascinante Venecia, con sus canales, sus góndolas y el romanticismo que hay alrededor de una ciudad donde Vivaldi compuso parte de su obra. Una ambientación llena de datos importantes que ayudan al lector a situarse tanto política como social y culturalmente en ella, la autora procura que conozcamos lo máximo de esta etapa que puede ser un tanto convulsa para el gobierno del gran duque Leopoldo, con los posibles alzamientos y las revueltas que piden un cambio inmediato para la sociedad, algo que está muy bien reflejado en la novela y que ayuda a que la lectura sea mucho más amena y adictiva. Sin duda, una narración cuyo ritmo va haciéndose más intenso a medida que avanzamos, ya que los hechos hacen que nuestros protagonistas se impliquen cada vez más y la intriga comience a formar parte de la historia metiéndonos de lleno en un asesinato, un misterio por resolver y la búsqueda de un valioso tesoro por el que alguien es capaz de matar. Por esto mismo, Aria y Lorenzo han sido dos piezas fundamentales en el libro, ella como una mujer que posee la fortaleza necesaria para enfrentarse a la desgracia que ha ocurrido en su vida y él como el caballero de brillante armadura que tiene que protegerla a toda costa, sin embargo, ambos no son tal y como se muestran a los demás, pues la dama tiene valentía para idear un plan de huida, pero también se siente sola y necesitada cuando lo lleva a cabo. El conde, por el contrario, posee la fuerza para cuidar de ella, pero no confía en sus sentimientos, los cuales ya se vieron traicionados una vez y no desea volver a sufrir. De este modo, ambos tendrán que lidiar con sus miedos y sus inseguridades, afianzar una confianza que no tardará en llegar y que les permitirá descubrir muy pronto que el suyo es un amor único, libre de malentendidos y secretos que puedan empañar su felicidad. Una pareja que nos hará vivir un romance muy especial al mismo tiempo que nos llevan de la mano para descubrir los misterios que envuelven la figura de Vivaldi, el cual nos regaló melodías maravillosas y que la autora ha querido que aquí lo conozcamos un poquito para apreciar todavía más su obra. Con respecto al resto de personajes, ha habido unos cuantos que tienen cierta relevancia en la trama, sin embargo, su papel ha sido secundario y de acompañamiento a los protagonistas, aunque, alguno que otro nos tiene preparadas sorpresas que como lectora me han gustado bastante. En definitiva, una deliciosa novela que nos invita a soñar con ese amor único, intenso y esperanzador, capaz de librar batallas y derrotar enemigos, una melodía perfecta donde Aria y Lorenzo sabrán tocar las notas que les proporcionarán la felicidad y que tendrá la Toscana como escenario de tan formidable romance.
Las estaciones del corazón de Christine Cross ha supuesto un reencuentro inolvidable con la pluma de la autora, una historia donde Aria tendrá que vencer sus miedos y confiar en el hombre que ha sabido colarse en su corazón, Lorenzo será su tabla de salvación cuando todo su mundo se derrumbe, una pareja que deberá descubrir un secreto mucho tiempo oculto al mismo tiempo que intentará defenderse de un asesino que amenaza la vida de la joven y que pone en peligro esa felicidad que ambos ansían.
Gracias a la autora y a HQÑ por el ejemplar ·
¡Hola! No te puedo asegurar que vaya a leerlo pero sí que me resulta interesante que además del romance haya por ahí un secreto oculto por descubrir. Un besote :)
ResponderEliminar¡Hola! Mira que yo no soy mucho de romance histórico, pero la premisa de esta historia me ha cautivado por completo, sobre todo lo relacionado con la figura de Vivaldi, así que me lo anoto sin pensarlo 2 veces :)
ResponderEliminarBesitos
Gracias por al reseña. Te mando un beso.
ResponderEliminarGracias por la reseña. te mando un beso
ResponderEliminarLa verdad es que estos temas no me atraen, pero gracias por la info. Un beso.
ResponderEliminarhola
ResponderEliminaresta autora me gusta, pero este libro no me llama mucho la atención. Quizás me anime más adelante, pero ahora mismo lo dejo pasar
Gracias por la reseña
besotessssssssssss