Reseña | Un cuento perfecto, Elísabet Benavent

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Suma · 20 Febrero 2020 · Contemporáneo · Autoconclusivo

¿QUÉ SUCEDE CUANDO DESCUBRES QUE EL FINAL DE TU CUENTO NO ES COMO SOÑABAS?

- Érase una vez una mujer que lo tenía todo y un chico que no tenía nada.

- Érase una vez una historia de amor entre el éxito y la duda.

- Érase una vez un cuento perfecto.

Elísabet Benavent, @BetaCoqueta, regresa al panorama de la literatura con una novela que explora el significado del éxito en la vida y reflexiona con ironía y humor acerca de las imposiciones sociales, la presión del grupo y la autoexigencia que, aunque cueste creerlo, no es sinónimo de felicidad.

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Elísabet Benavent nos trae una nueva historia donde la perfección y los cuentos de hadas son ideas sobrevaloradas y preconcebidas, lo que nos transportará a una profunda y sorprendente trama con personajes carismáticos, llenos de miedos y dudas que superar. De esta forma, Un cuento perfecto nos habla de sueños, de incomprensión, de autodescubrimiento y de grandes decisiones no escritas en el destino que nos llevarán a desenlaces inesperados según el prisma con el que se mire el mundo.

Así pues, Margot es una mujer sujeta a los convencionalismos de la sociedad, una rica heredera que lo tiene todo, un apellido respetado y conocido, dinero, una inmensa cadena hotelera y un novio que la adora y quiere. Su vida es perfecta o eso piensan todos salvo ella misma, por lo que el día más decisivo de su existencia se verá rodeada de dudas y temores, que la empujará a escapar de todo y todos, abandonando incluso a su amado Filippo, rompiendo así con lo que amaba hasta el momento y con la vida que llevaba y todo ello para lograr entender las impulsivas decisiones que ha cometido últimamente. Sin más, pérdida y sola con sus neuras y juzgada por todos aquellos que la rodean decidirá alejarse de quienes la han conducido por años a no ser ella misma, preocupada constantemente de la opinión de terceros y de ser solo lo que otros desean que sea. No obstante, en esa nueva aventura chocará con una visión fresca y distinta de la vida, un joven que como ella tiene la mirada triste, vagando por el mundo sin encontrar su lugar, una compañía providencial que la acompañará en el viaje que iniciará, descubriendo una perspectiva de la vida alejada de los estrictos principios inculcados a lo largo de toda su existencia.

David nunca ha tenido suerte en el amor y su última elección no podría ser más desacertada, una mujer inalcanzable que juega con su corazón y su frágil autoestima. Por este motivo, cuando finaliza su actual relación todo parece acabar, nada tiene sentido y su afán por reconquistarla lo llevará a cometer locuras que minarán cada vez más su moral. Sin embargo, en los momentos donde el caos invade su mente conocerá a la chica perfecta para salvarlo de su descontrol, viendo en ella a una amiga, un alma afín con mucho que aportar a su triste mundo, ayudándolo a conseguir aquello que más ansia.

Con lo cual, dos vidas sin nada en común, que vienen de mundos opuestos coincidirán cuando más necesitaban compresión, aunando sus corazones más allá de lo imaginado. Todo los guiará a iniciar una amistad sin trabas ni miedos a ser juzgados, logrando ser libres lejos de los convencionalismos y de la presión que ellos mismos se imponen, haciendo que compartan grandes instantes, lejos de aquello que imposibilita su crecimiento, dando pie a una aventura sin precedentes. No obstante, los sentimientos no se rigen por la razón y estos acabarán surgiendo complicándolo todo, demostrando que la perfección no existe y que los cuentos no siempre se hacen realidad, rompiendo así su existencia en mil pedazos, la cual deberán reconstruir decidiendo el camino a seguir, elección difícil que no siempre llevará a donde queremos algo que la autora nos dejará bien reflejado en el final de esta impactante historia.

Elísabet Benavent nos vuelve a sorprender con una novela compleja llena de emotividad, contradicciones y dudas, pues esta historia nos muestra la debilidad humana y el dolor ajeno, una trama dirigida a conocernos mejor, a crecer y madurar, pero sobre todo a conocer los distintos caminos que una persona tiene, lejos de la presión e imposición social. No obstante, antes de llegar al desenlace de esta obra, viviremos un romance apasionado, sensual, cargado de erotismo, pero también de amistad y comprensión, ayudando a este par de almas perdidas a hallar su lugar en el mundo, siendo ellos los únicos que importan y solo sus sueños y deseos serán tenidos en cuenta, una lectura con idas y venidas, con grandes descubrimientos que conocer y con personajes complejos que estudiar y entender, pues Margot y David no serán fáciles, tendrán mentes y corazones complejos que nos desvelarán un libro donde los cuentos no son como esperaban y los Erase una vez nunca terminan como se espera. Asimismo, los secundarios de la obra van acorde con los principales, dejándonos momentos entrañables, emotivos, pero también decepcionantes, aunque primordialmente reveladores lo que nos abrirán los ojos ante una realidad donde cada cual nos creamos nuestro propio destino. Finalmente, solo alabar la prosa de Elísabet, tal vez en algunos instantes con una narración demasiado extensa, pero eso es lo mágico de su autora, transportarnos a bellas historias que nos hace replantearnos todo, con una pluma intensa y fluida con mucho que ofrecer, por lo que animaros con este nuevo libro de una escritora que sabe cómo ganarse el cariño y atención de sus lectores.

Un cuento perfecto de Elísabet Benavent nos relata la verdad del mundo donde no siempre lo soñado acaba sucediendo, un romance con un desenlace no escrito en las estrellas que guiarán a Margot y David a descubrir que no siempre acaban las cosas como uno desea.