Reseña | Propiedad Privada, Joanna Wylde

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Libros de Seda · 2 Marzo 2015 · Contemporáneo · 1º Reapers MC

Lo último que necesita Marie es una complicación como Horse, acaba de dejar al gilipollas de su ex marido, un maltratador, y no está para pensar en hombres... Pero este motero enorme, tatuado e irresistible que aparece una tarde en la caravana de su hermano se lo pone muy difícil.

Horse es miembro del Reapers Moto Club, un hombre acostumbrado a conseguir lo que quiere. Y quiere a Marie, en su moto y en su cama. Ya.

Marie no está dispuesta a convertirse en la «propiedad» de nadie. Sin embargo, cuando su hermano roba al club se verá forzada a ofrecerse como garantía para salvarle la vida.

La primera novela que leí de Joanna Wylde me dejó con muy buen sabor de boca y con ganas de mucho más, ya que Legado oculto, segundo libro de la serie Reapers MC, resultó ser todo un descubrimiento donde no solo conocí a grandes protagonistas, también supe de secundarios que me conquistaron y enamoraron. Pues bien, tras la lectura del libro que he mencionado me quede intrigada por conocer la historia de dos personajes que ya habían tenido su romance en la primera novela de la saga, Propiedad privada, así que no he parado hasta leerla y una vez finalizada solo puedo deciros que me ha encantado y que ha superado todas mis expectativas, demostrando nuevamente su autora el gran talento que tiene a la hora de escribir una obra de estas características, plagada de erotismo y de altos niveles de testosterona, que van a empujar a nuestra heroína a luchar contra la vena un tanto machista y controladora de su chico y de los Reapers MC.

Marie acaba de poner fin a su matrimonio. Tras largos años soportando toda clase de maltrato finalmente se ha atrevido a dar el gran paso. Ahora, ante la falta de recursos no tiene más remedio que buscar refugio en el que fue su hogar durante años junto a su hermano Jeff. La caravana donde se crió le va a aportar la seguridad que tanto ha deseado y con su apoyo espera salir adelante. Sin embargo, todo se tuerce cuando los negocios que este mantiene con el club motero se ven alterados por la mala cabeza del hermano de Marie. Asimismo, esta dulce y luchadora joven no va a permitir que estos rudos tipos dañen a su hermano, así pues, cuando le ofrecen un trato a cambio de la vida de Jeff esta no duda en aceptarlo sin pensar en las consecuencias que esta precipitada decisión puede acarrearle.

Horse es un Reapers que tras conocer a la tierna pero fogosa Marie va a hacer todo lo que esté en sus manos para convertirla en su chica. Sin embargo, no todo va a ser tan sencillo, pues ella rehúye la forma de vida del club y además el robo llevado a cabo por Jeff no va a ayudar en su conquista. Por este motivo, cuando todo sale a la luz, Horse aprovecha la oportunidad que se le presenta para tomarla como garantía y así salvarle la vida al inepto de su hermano, un plan que más que solucionarlo todo lo acabará liando mucho más.

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- Imagen extraída de Google para ser reformada -

Marie y Horse empezarán una convivencia donde ella es propiedad de este arrollador hombre pero sin los privilegios de ser su mujer, algo que ocasionará mucho dolor a su enamorado corazón, porque Marie está locamente enamorada de este duro motero aunque lo niegue una y otra vez. Asimismo, Horse intentará acercarse a su chica aunque su actitud fría y posesiva puede confundir mucho más a Marie provocando continuos enfrentamientos y desavenencias. Sin embargo, la convivencia, el incesante roce y la pasión que se desata cuando están juntos conseguirá unirlos mucho más y abrirles los ojos ante lo que realmente sienten. No obstante, no solo van a tener que conocerse mucho más para alcanzar la felicidad, también tendrán que enfrentarse a fuertes peligros de los Reapers MC que acechan a Marie, junto con el gran obstáculo que supone Jeff y sus descabellados actos contra esta familia de moteros, problemas que solo confiando el uno en el otro podrán superar y así poder dejar atrás el gran abismo que los separa.

Joanna Wylde comienza esta serie con fuerza, con una pareja protagonista que van a tener que dejar de lado muchos ideales y principios si quieren estar juntos. Asimismo, toda esta batalla de sentimientos tendrá como telón de fondo a un carismático y temible club motero que en realidad son una enorme familia que protege y ayuda a los suyos como demostrarán a Marie con sus actos. No obstante, a lo largo de la novela no solo veremos su parte buena (amistad, lealtad y apoyo) con la que te sentirás arropada, también veremos la traición y las consecuencias que acarrea. Así pues, con esta novela vas a vivir plenamente lo que es ser un Reapers MC y lo que es estar fuera del círculo pues el respeto que se ofrece es diferente y nuestra heroína acabará entendiendo y apreciando el mundo aparte que forman. Igualmente, creo que todo buen libro debe conseguir sacar a flote una gran diversidad de emociones al lector y este puedo deciros que lo ha conseguido, pues he sufrido por amor, me he enfadado, me he reído y he llorado, con esto último mi corazón se llenó de tristeza y pesar pero también pude ver con absoluta claridad la lealtad que existe entre este grupo de hombres y mujeres hacia los suyos, momentos muy hermosos aunque dolorosos que si lo termináis leyendo me entenderéis. Finalmente comentar que si la pareja protagonista te conquista con su cabezonería y con el gran amor que se tienen, los secundarios se convierten en personajes imprescindibles para el éxito de esta magnífica novela, haciéndote desear seguir leyendo más de ellos y de lo que le tiene reservado el destino. Con una prosa fluida, fresca y ágil consigue que al lector le resulte imposible dejar de leer, disfrutando de escenas muy sugerentes y eróticas, perfectamente descritas, que aunque utiliza un lenguaje un tanto brusco para nada es grosero, al contrario, es perfecto para estos tatuados y atractivos moteros.

Propiedad privada de Joanna Wylde te presenta un romance plagado de dificultades donde el mayor obstáculo que deben superar nuestra pareja son ellos mismos, por lo que solo alcanzando la confianza mutua podrán entregarse a un amor sin reservas donde ambos serán propiedad privada del otro.